jueves, 22 de noviembre de 2012

Estados Unidos y Canadá: Día de Acción de Gracias

El cuarto jueves de Noviembre en Estados Unidos y el segundo lunes en Canadá, se celebra el día de Acción de Gracias.



Hoy, millones de familias se juntarán en Estados Unidos para celebrar esta festividad alrededor de un gran pavo asado, en una tradición que data de 1621. Un año antes, en 1620, el barco Mayflower desembarcó en Plymouth con 102 peregrinos que escapaban de la pobreza y de las constricciones de la iglesia de Inglaterra . Eran los primeros inmigrantes llegados a Norteamérica.
Los indios nativos de Massachussets los recibieron amistosamente y compartieron sus conocimientos sobre las cosechas, la caza y la pesca. 

Para celebrar que habían logrado sobrevivir a un duro invierno y que contaban con una abundante cosecha que les ayudaría a afrontar el siguiente, organizaron una cena a la que invitaron a los indios nativos de la tribu Wampanoa para mostrarles su agradecimiento. El plato principal fue un pavo y de esa manera se estableció la tradición de comer este ave en el día de acción de gracias.
 
A partir de entonces, cada año, los colonos se reunían con sus familiares, vecinos y amistades para dar gracias por todas las bendiciones dadas en ese año.

Como curiosidad comentar que la pacífica convivencia con los indios nativos duró pocos años, ya que la masiva afluencia de colonos europeos y la ocupación creciente de los territorios de los indígenas les llevó a enfrentamientos continuos. El resultado de tales confrontamientos fue la casi total exterminación de los indios Wampanoag. Tras la llamada guerra del Rey Philip en 1675, tan sólo sobrevivirían 400.

Uno de los actos más multitudinarios de este día es el desfile que realizan en Manhattan los grandes almacenes Macy's, que atrae a millones de personas a la avenida Broadway para ver los enormes globos gigantes y presenciar las actuaciones de artistas invitados.

jueves, 15 de noviembre de 2012

Un paseo por la Concha: Donostia - San Sebastián

En ocasiones no hace falta irse demasiado lejos para disfrutar de un día en un paraje incomparable. 

Eso hice yo la semana pasada, cuando decidí ir a pasar el día a Donosti. A primera hora de la mañana cogí el coche, pasé a recoger a una amiga y en apenas hora y cuarto estábamos en la ciudad conocida como La Bella Easo.
Estábamos a principios de Noviembre y era un día laborable por lo que apenas había turistas por sus calles. Eso, unido a que hacía un día espectacular, animaba a caminar por sus calles sin preocuparse de nada más.

Nuestro visita empezó en el Peine del Viento, la obra escultórica de Eduardo Chillida, situado en la bahía de la Concha, al final de la Playa de Ondarreta. Está compuesto por tres esculturas de acero, de 10 toneladas de peso cada una, incrustadas en unas rocas que dan al mar Cantábrico, cuyas olas las azotan. Dichas esculturas se encuentran allí desde 1977 y sin duda es uno de los rincones más fotografiados de Donostia. 
Merece la pena sentarse en el borde del paseo y disfrutar del ruido del mar, las rocas, el viento y las grandes vistas que ofrece; un hermoso lugar donde olvidarse de todo. Para algunos en cambio, no es más que un amasijo de hierros oxidados, pero para mí es el mejor rincón de toda la ciudad.



Tras las fotos obligadas, nos dispusimos a tomar un café en el restaurante/cafetería Branka. Está a pocos metros de la obra de Chillida y su terraza ofrece unas estupendas vistas.
Tras recargar las pilas, emprendimos la marcha por el Paseo Marítimo de la Bahía de la Concha. Como indica su nombre, tiene la forma de una concha, y alberga dos playas (Ondarreta y la Playa de La Concha); también una isla, la de Santa Clara. Además, ocupa el espacio comprendido entre dos montes, el Igeldo al oeste y el Urgull al este.




Como he indicado, nuestro paseo empezaba por la playa de Ondarreta. Sobre nosotros dejamos el monte Igeldo a cuya cima se puede acceder mediante un funicular. Las vistas son impresionantes desde allí, por lo que es totalmente recomendable gastarse los 2,70 euros que cuesta el trayecto. Además, en el precio del billete está incluida la entrada al Parque de Atracciones Igeldo que data de 1912. No es Port Aventura, pero seguro que hará las delicias de muchos peques como viene haciéndolo desde hace un siglo. De hecho, su lema en el centenario ha sido "Cien años repartiendo sonrisas". Aún recuerdo con claridad la excursión con el colegio a dicho parque, cuando tenía apenas 7 años.

Sólo disponíamos de pocas horas para visitar la ciudad, por lo que no pudimos hacer la subida en el funicular. Seguimos por el paseo marítimo dejando a la derecha los jardines de Ondarreta, que componen un variado y simétrico conjunto floral. Destaca la gran escultura que el Ayuntamiento y los vecinos de la ciudad dedicaron a la reina María Cristina de Austria, así como una escultura moderna (Zeharki) obra del autor Juan Ramón Anda.

Entre las Playas de Ondarreta y la Concha, dividiéndolas, se encuentra el palacio de Miramar. La antigua residencia de los reyes forma parte del patrimonio de la ciudad desde 1971. Las salas acogen exposiciones y recepciones oficiales y no están abiertas al público. Los jardines, en cambio, son de acceso libre.


Pasito a paso llegamos a la Playa de la Concha, sin duda una de las playas más conocidas de todo el País Vasco. Durante este paseo y hasta el final de la bahía se encuentra la famosa barandilla de La Concha, diseñada por Juan Rafael Alday e instalada en la década de 1910. Sin duda todo un emblema de la ciudad.


En el Paseo de La Concha se encuentran los elementos arquitectónicos y ornamentales más destacados del paseo que bordea la bahía: unas características farolas situadas al comienzo de la rampa de bajada a la playa de La Concha, dos grandes relojes, los edificios del balneario de La Perla (cuya terraza para tomar el aperitivo es una de las más codiciadas de la ciudad) y la Real Casa de Baños.

Casi al final del paseo, un edificio destaca sobre cualquier otro: el Ayuntamiento. Esta construcción fue, desde su inauguración en 1897 hasta su cierre en 1924 por la prohibición del juego, sede del Gran Casino de San Sebastián, en donde se entretenían políticos, escritores y artistas de la Belle Epoque. En 1947 se convirtió en la Casa Consistorial de la ciudad, que cambió su sede desde la Plaza de la Constitución, actual sede de la Biblioteca Municipal. El Ayuntamiento convive con el incesante ambiente de la Parte Vieja a sus espaldas y con la tranquilidad de los jardines de Alderdi Eder de frente, con su tiovivo centenario.


Siguiendo con nuestro paseo llegamos al puerto situado al pie de la estatua del Sagrado Corazón que corona el monte Urgull. Es un puerto pequeño de forma triangular, con una zona pesquera y otra de recreo.


Al final del paseo se encuentra el Aquarium de Donostia, sin duda una visita imprescindible para familias con niños. Os dejo el enlace del mismo: http://www.aquariumss.com/

Llegaba el momento de dejar el paseo de la Concha y adentrarse en la parte vieja de la ciudad, probablemente el sitio más visitado. Los pintxos, esas pequeñas maravillas gastronómicas, forman parte del alma de la ciudad. Pero eso lo dejo para otra entrada.

¡Que lo disfrutéis!

martes, 6 de noviembre de 2012

Un paseo por Barcelona: El Barrio Gótico

Una visita que intento hacer cada año y no me canso de repetir es a la gran ciudad de Barcelona. Cada vez que voy descubro nuevos rincones, pero si algo me agrada particularmente es su Barrio Gótico.

El Barrio Gótico es uno de los cuatro barrios que conforman la Ciutat Vella (Ciudad Vieja) y es el núcleo más antiguo de la ciudad y su centro histórico. Está delimitado por Las Ramblas, Vía Laietana, el Paseo de Colón y la Plaza de Cataluña; allí existen numerosos monumentos de gran valor patrimonial e histórico, desde edificios y plazas medievales hasta verdaderas reliquias de la época Romana. Esta mezcla histórica de callejones estrechas y plazas, en muchos casos peatonales, está llena de carácter y encanto siendo un lugar de numerosas tiendas, bares y restaurantes.

Sin duda es una gran experiencia perderse por sus calles, pero hay ciertos lugares que nadie debería perderse:

- Catedral de Santa Eulalia: La catedral actual se construyó durante los siglos XIII a XV sobre la antigua catedral románica, edificada a su vez sobre una iglesia de la época visigoda a la que precedió una basílica paleocristiana, cuyos restos pueden verse en el subsuelo, en el Museo de Historia de la Ciudad. La finalización de la imponente fachada en el mismo estilo, sin embargo, es mucho más moderna (siglo XIX). En su claustro viven 13 ocas blancas ya que se dice que la mártir Santa Eulalia era pastora de estos animales en Sarriá y fueron ellos quienes, con sus graznidos, la avisaron de la llegada de sus verdugos. El número de ocas corresponde con la edad de la joven Eulalia.

En la plaza de la catedral se celebran durante todo el año distintos eventos que la otorgan un carácter especial: la semana del libro en catalán en septiembre , los bailes de Sardana (baile típico catalán) los domingos al mediodía, el mercado de antigüedades cada jueves y especialmente el mercado de Navidad. En el mercado, una fiesta tradicional en Barcelona, se venden figuras para belenes, árboles de Navidad, adornos navideños, dulces y artesanías. 


- Restos del templo de Augusto: Quizás sea de los lugares menos visitados pero sin duda, por los siglos de historia que poseen es un lugar que merece mucho la pena ver. El templo de Augusto fue un templo construido al emperador César Augusto en lo que fue el antiguo foro de Barcina.  Los restos (4 columnas) del templo están encajados dentro de un palacio renancentista que actualmente es la sede del Centro Excursionista de Barcelona (c/Paradis, 10). La entrada es gratuita, por lo que recomiendo a todos los viajeros que no dejen de visitar los restos de un pasado esplendoroso, que ha sobrevivido encerrado entre cuatro paredes.



- Basílica Santa María del Mar: Famosa por ser escenario de la novela de Ildefonso Falcones, La catedral del mar, Santa María del Mar es uno de los monumentos arquitectónicos más bellos de Barcelona. Fue construida entre 1329 y 1393, cuando Catalunya era una de las grandes potencias marítimas y comerciales. Es un precioso ejemplo del estilo gótico catalán. La fachada principal de la basílica da hacia una pequeña plaza, un poco estrecha para poder apreciarla plenamente. Pero si entras, es un lugar impresionante. El magnífico rosetón no es el original. El primero cayó sobre la multitud el día del Corpus en 1428 debido a un gran seísmo de cerca de 8 grados en la escala de Richter. Docenas de personas murieron aquel día. Años más tarde se repuso el rosetón por el que podemos ver actualmente.



- Plaza de Sant Jaume: Esta plaza es una de las más antiguas y representativas de la ciudad. Desde la antigüedad ha sido siempre el centro histórico y administrativo de la ciudad, emplazada donde se levantaba el foro de la ciudad romana. Hoy en día es donde se encuentran los dos edificios de la administración catalana más importantes: la Generalitat de  Catalunya y el Ayuntamiento de Barcelona, uno frente al otro. Ambas instituciones ya existían en la época medieval y son aún hoy en día las encargadas de gobernar la vida de catalanes y barceloneses. La ubicación de ambos edificios no es casual, ya que la plaza Sant Jaume se encuentra en la confluencia de las antiguas calles principales de la Barcino romana, el Cardus (actuales calles de la Llibreteria y del Call) y el Decumanus (ahora calles Ciutat y Bisbe).




- Conjunto monumental Plaza del Rei: Este es el núcleo donde nació el Museo de Historia de la Ciudad de Barcelona en el año 1943. Los restos que contiene van desde la Barcino romana del siglo I a. C. hasta la Barcelona del siglo XIII d. C., ya en la Alta Edad Media. Una visita a su subsuelo permite pasear por las calles de la Barcelona romana, acercarse a la muralla de la época, entrar en una tintorería del siglo II d. C. o contemplar los vestigios de la primera comunidad cristiana de la ciudad. El Conjunto se completa con importantes edificios medievales como el Palacio Real, la Capilla de Santa Àgata o el Palacio Gótico conocido como Casa Padellàs. En este último edificio se ubican las exposiciones temporales dedicadas a la Barcelona moderna y contemporánea. 



- Plaza Real: Situada junto a Las Ramblas, esta sorprendente plaza de estilo neoclásico es una de las más agradables y animadas de la zona. Esta plaza de forma rectangular sirve de punto de encuentro y de descanso para mucha gente, por lo céntrico de su localización y por su popularidad.
En el centro de ella se sitúa la llamada fuente de las Tres Gracias, donde muchos se toman un descanso luego de una buena caminata diurna o se toman algo para calentar el cuerpo previo a una buena fiesta en alguno de los clubes y bares que se encuentran a su alrededor. Además, contiene uno de los primeros encargos de Gaudí realizado por el Ayuntamiento de Barcelona: Las farolas o fanals.



- Barrio Judío: A pesar de que el barrio conocido como El Call fue abolido hace más de 600 años, aún es posible encontrar algunos restos del que fuera el barrio judío de la ciudad. Una serie de calles, callejones, pequeñas plazas que representan a la olvidada comunidad medieval judía que existió en la Ciudad Condal. Su destino fue tan trágico como el resto, siendo saqueada durante la famosa oleada antijudía de 1391, en la que murieron más de 300 judíos.

Os dejo un enlace con una gran ruta por la Barcelona judía: Ruta por Barcelona Judía


Los mencionados son algunos de los puntos más característicos del Barrio Gótico pero hay muchos otros que no conviene perderse. Hacer un recorrido a pie por el barrio gótico es la mejor forma de impregnarse de su encanto. ¡Que lo disfrutéis!.

jueves, 1 de noviembre de 2012

Un paseo por Halloween: 10 lugares donde pasar miedo

Aprovechando la fiesta de Halloween o el día de todos los Santos he preparado un recopilatorio de 10 sitios donde pasar miedo:

1. Salem (Massachusetts - Estados Unidos).

Conocida como "la ciudad de las brujas". En 1692, 19 mujeres, todas condenadas por brujería, fueron llevadas a Gallows Hill en Salem para ser ahorcadas por la Inquisición tras los famosos juicios de Salem. No solo ellas fueron las víctimas, ya que al menos otras 5 personas murieron en la cárcel. Fue una barbarie judicial y popular en la que los propios vecinos se acusaban unos a otros.

Este marco histórico provoca aluviones de turistas especialmente en Octubre, cuando se celebran más de 140 eventos terroríficos: mansiones embrujadas, desfiles, recreación de los juicios, etc.

Algunos de los puntos más interesantes son: el Cementerio, el Museo de Cera, la Witch House (que perteneció a uno de los jueces que condenaron a muerte a las brujas) y, por supuesto, el Salem Witch Museum.

Más información en su web: http://www.salemweb.com/hh/

 

2. Transilvania (Rumanía)

De la ciudad de las brujas a Transilvania, cuna de Vlad Draculea conocido como Vlad el Empalador. Vlad fue príncipe de Valaquia (sur de Rumanía) entre 1456 y 1462 y era famoso por su manera de castigar a los enemigos y traidores.
A partir de su historia, Bram Stoker creó el personaje del Conde Drácula, un vampiro de Transilvania que se convirtió en uno de los personajes más famosos de las películas de terror.

La ciudad de Bran, cuna del personaje de Bram Stoker, es una excursión perfecta para celebrar Halloween en Europa. Podremos visitar su castillo, donde recorreremos los pasillos por donde se supone merodeaba el vampiro tras beberse la sangre de sus víctimas. Además, se puede realizar un circuito que nos llevará a otras zonas como el Castillo de Poenari y el de Hunya, relacionados con Vlad el Empalador.




3. Las catacumbas de París.

Las catacumbas de París consisten en una red de túneles subterráneos que, tras albergar durante la época romana minas de piedra caliza, fueron convertidas en un cementerio a finales del siglo XVIII.
Durante 15 meses, millones de huesos fueron transportados desde los cementerios de la ciudad a las paredes de estos túneles. Este transporte se llevaba a cabo durante las noches, cruzando la ciudad en carruajes y acumulando los restos de aproximadamente 6 millones de parisienses.

La leyenda cuenta que multitud de espíritus, molestos por el irrespetuoso traslado que sufrieron sus restos, habitan las catacumbas e incluso se atreven de dar algún que otro inocente susto al visitante ocasional.

Pese a que no se celebra en ellas ningún acto por Halloween, sin duda el 31 de Octubre es una fecha idónea para visitarlas.

Página oficial: http://www.catacombes-de-paris.fr/
 



4. El monte de las Ánimas en Soria (España).

El Monte de las Ánimas es uno de los relatos que forman parte de la colección de Leyendas de Gustavo Adolfo Bécquer. Narra lo ocurrido a un joven llamado Alonso al intentar complacer a su prima durante la noche de difuntos en el Monte de las Ánimas de Soria. Os recomiendo la lectura del que para muchos es el mejor cuento de terror de la literatura castellana.

La Asociación Cultural Amigos de las Ánimas y el Ayuntamiento de Soria organizan cada año distintas actividades la noche del 31 de Octubre, coincidiendo con la noche de todos los Santos; desde proyecciones, pasando por desfiles y por supuesto la lectura de la obra.

Más información: http://www.soria.es/


5. Darmstadt (Alemania: Burg Frankenstein.

El Castillo de Frankenstein es un castillo en una cima situada a 5 km al sur de Darmstadt, en Alemania. El castillo ganó fama gracias a Johan Konrad Dippel, alquimista y anatomista considerado un hechicero vinculado al infierno. Su experimento, que consistió en crear una nueva persona a partir de partes del cuerpo de cadáveres y la sangre de vírgenes, inspiró a Mary Shelley para escribir su famosa novela.

Con motivo de la fiesta de Halloween se celebran durante dos semanas distintos eventos en el castillo y es visitado por más de 15.000 personas.

Cerca de este siniestro castillo no nos podemos perder la montaña magnética llamada Ilbes Berg, uno de los lugares de culto de brujas más famoso. Las piedras magnéticas que se encuentran aquí (magnetismo supuestamente originado por brujas), son hoy en día un monumento geológico natural. Este lugar de culto en el pasado nos deja leyendas interesantes. 


 

6. Londres: Jack el Destripador, Sweeney Todd y Torre de Londres.

Desde las casas embrujadas hasta la Noche de las Hogueras, hay algo que vincula a Londres con la noche. Pensad en Jack el Destripador, la peste Negra, el Rocky Horror Show, el sanguinario Sweeney Todd y todo tipo de actividades sospechosas que tienen lugar en los callejones oscuros de esta ciudad; sin duda un lugar muy apropiado para pasar la noche del 31 de Octubre con muchas y variadas actividades. De hecho son tantos, que precisarían una entrada exclusiva, así que simplemente mencionaré algunas de ellas. 
Historias de brujas en el London Eye, visitar la London Dugeon (la Mazmorra de Londres), o acudir al distrito de Whitechapel (East End) donde se realizan rutas a pie por los escenarios de los crímenes cometidos por el infame Jack el Destripador. El paseo empieza de noche por un laberinto de callejuelas que unen los puntos claves de los sangrientos asesinatos, e incluye visitas a locales que guardan periódicos originales de la época. 

En el centro de Londres, la casa en el número 50 de Berkeley Square tiene el dudoso honor de ser "la mayor casa embrujada de Londres”. Son muchas las muertes sin explicación que tuvieron lugar en este edificio en el siglo XIX.  Como consecuencia de ello, la casa quedó deshabitada durante años, pero la gente que pasaba por delante hablaba de extrañas luces que se encendían y apagaban a todas horas, ruidos estremecedores y visiones fantasmales. Dichas leyendas inspiraron la película de 1947 The Ghosts of Berkeley Square. 

Por último, hemos de visitar la Torre de Londres; pese a que no hay ninguna actividad en Halloween es uno de los lugares que no podemos olvidarnos de visitar. Con casi mil años de historia, este complejo ha servido como Palacio Real, armería, fortaleza, prisión, Real Casa de la Moneda y custodia de las Joyas de la Corona. Asegura la leyenda que muchos de los ejecutados en el edificio aún habitan entre sus paredes.
Sin duda el fantasma más famoso es el de Ana Bolena, segunda esposa de Enrique VIII, decapitada en 1536. Desde entonces, el espectro de Ana Bolena recorre incansablemente los recintos de la torre con la cabeza bajo el brazo. Otras almas en pena que supuestamente vagan por los pasillos son el canciller Thomas Becket, antiguo gobernador de la torre y Lady Jane Grey, acusada de alta traición.

Más información:




7. Nueva Orleans (Estados Unidos).

Si Nueva Orleans es mundialmente famosa por sus fiestas y por su música, en la Noche de las Brujas no podía ser menos. Participando en la “Ruta de los Espíritus”, descubriremos las numerosas criptas de sus cementerios y pasearemos por el Vieux Carre, o French Quarter, uno de los barrios embrujados de la ciudad, para hacer una parada en un auténtico templo donde, aun hoy, se realizan rituales de vudú. Como no podía faltar, podremos disfrutar de una versión aterradora del desfile de Mardi Gras, donde las calles se llenarán de extrañas criaturas y divertidos personajes.

De todos sus rincones el más inquietante es la mansión del 1140 de Royal Street, hogar de la siniestra Madame LaLaurie. Delphine y su marido Louis llegaron esta casa en 1832, con un amplio contingente de esclavos. Los rumores de gritos y desapariciones rodearon el lugar hasta que, en 1834, un incendio dejó al descubierto la terrible verdad. El ático de la mansión era una sala de torturas donde LaLaurie tenía enjaulados a varios esclavos, a los que había sometido a terribles operaciones y experimentos. LaLaurie escapó de la ciudad antes de ser apresada por la justicia.
Como era de esperar, las personas que visitan hoy día la mansión hablan de actividad paranormal, como apariciones de un hombre negro encadenado y una esclava torturada por Madame LaLaurie. También se han escuchado gritos terribles, acompañados de un olor pútrido.



8. Bosque de Aokigahara (Japón).

Es un bosque de 35 km2 ubicado al noroeste de la base del Monte Fuji. 

El mar de árboles, como se le conoce en Japón está sacado de unas de las leyendas más tenebrosas que nos podemos imaginar. Este bosque increiblemente tupido es tan denso que apenas se filtra la luz del sol a través de las copas de los árboles. En realidad es un lugar bello si no  te molesta toparte con alguna persona muerta colgada de un árbol. 
Por alguna razón, muchas de las personas que entran a este bosque se suicidan. Cada pocos metros, aquel que decide adentrarse en Aokigahara se encuentra con carteles que le recuerdan cosas como que la vida es un precioso regalo que les han dado sus padres y que deben pensar en sus hermanos, hijos y demás familiares antes de tomar una trágica decisión.

El bosque tiene una asociación histórica con demonios de la mitología japonesa, habiendo poemas de 1000 años indicando que el bosque está maldito. De hecho, en la antigüedad, fue un lugar en el que, en tiempos de carestía, algunas familias dejaban abandonados a sus ancianos y a los más pequeños de la casa, al no poder mantenerlos.







9. RMS Queen Mary (Long Beach, California, Estados Unidos).

En 1936 zarpaba desde Glasgow (Inglaterra) este crucero de lujo, que acogió a personalidades como Winston Churchill o la realeza británica. El navío recorrió el Atlántico hasta 1968, año en el que quedó fuera de servicio y anclado en Long Beach, California, donde sirve como museo flotante.

El Queen Mary es un barco conocido como “El Fantasma Gris”. También es un nido de fenómenos extraños, con más de 150 fantasmas identificados en su interior. Entre ellos están el espíritu de un hombre que murió aplastado en la sala de máquinas, una mujer que vaga en traje de baño y varios bailarines espectrales en la que fue zona de primera clase. Además, una de las habitaciones, la B340, se tuvo que cerrar al público por las constantes y misteriosas apariciones que tenían lugar. Y no pisen la cocina: allí fue horneado hasta su muerte un camarero durante la Segunda Guerra Mundial.

La noche de Halloween se celebra a bordo el "Drak Harbor" con shows siniestros, música diabólica, menús de miedo y personajes como Freddy Kruger por la cubierta del barco.







Altares decorados con flores anaranjadas o guinda y elegantes calaveras con sombrero forman parte de la colorida celebración del Día de Muertos en México, que combina tradiciones indígenas y cristianas. La conmemoración dura dos días, en los que se recibe a las almas de los muertos: el 1 de noviembre dedicado a los niños difuntos y el 2 de noviembre en honor a los adultos. En los panteones y en las casas se prepara para los difuntos las cosas que más les gustaban en vida, manteniendo una tradición que con los años compite cada vez más con la fiesta de Halloween de disfraces y dulces. Algunos son honrados con música, comida y tequila junto a la tumba, mientras que en los hogares se hacen altares con fotografías, papel de colores, fruta, pan de muerto -decorado con huesos- y calaveritas de chocolate o azúcar.
Si tuviéramos que escoger un lugar para pasar el Día de Muertos en México lo tendríamos complicado. Es una tradición que se extiende a lo largo y ancho del país, y son famosas estas fechas en lugares como Janitzio (Michoacán), Puebla, Catemaco, Tecómitl.
10. México.

Altares decorados con flores anaranjadas o guinda y elegantes calaveras con sombrero forman parte de la colorida celebración del Día de Muertos en México, que combina tradiciones indígenas y cristianas. La conmemoración dura dos días, en los que se recibe a las almas de los muertos: el 1 de noviembre dedicado a los niños difuntos y el 2 de noviembre en honor a los adultos. En los panteones y en las casas se prepara para los difuntos las cosas que más les gustaban en vida, manteniendo una tradición que con los años compite cada vez más con la fiesta de Halloween de disfraces y dulces. Algunos son honrados con música, comida y tequila junto a la tumba, mientras que en los hogares se hacen altares con fotografías, papel de colores, fruta, pan de muerto -decorado con huesos- y calaveritas de chocolate o azúcar.

Si tuviéramos que escoger un lugar para pasar el Día de Muertos en México lo tendríamos complicado. Es una tradición que se extiende a lo largo y ancho del país, y son famosas estas fechas en lugares como Janitzio (Michoacán), Puebla, Catemaco, Tecómitl.

Pero vamos a centrarnos en el poblado de San Andrés Mixquic, uno de los lugares más visitados el Día de muertos en Ciudad de México. La celebración del día de muertos en Mixquic incluye danza, teatro, música, exposiciones, exhibición de ofrendas, visitas guiadas y una variedad de elementos tradicionales, tanto gastronómicos como ornamentales.




Aquí tenéis unas cuántas sugerencias para disfrutar de una visita escalofriante en varios lugares del mundo, a vuestra elección.